Santa María de los Reales Alcázares; Blog “Hablar de este hermoso templo es, pues, en una palabra, hablar de los ubetenses de todo linaje y casta; ya vivan entre nosotros, ya estén en tierras lejanas, porque a todos, de esta Iglesia el mismo amor nos inflama; y todos hasta la muerte la llevan dentro del alma”.
sábado, 20 de junio de 2009
SANTA MARÍA DE LOS REALES ALCÁZARES, ALMACÉN DE ESTILOS ARQUITECTÓNICOS. PARTE 1.
Grabado número 1, Estilo ojival. Detalle de una capilla del Claustro.
viernes, 19 de junio de 2009
Un Capitel Con Motivos Eróticos o Pornográficos.
Entre unos de ellos, sobresale de modo especial, un capitel con motivos eróticos o pornográficos. (Según se vea). Que se sitúa en uno de los pilares del claustro, en la nave oeste, antes de entrar al interior de la iglesia.
En la Edad Media y en el pro-renacimiento, se vivía rodeado de símbolos y misterios. La religión lo inundaba todo, pero el pueblo llano tenía sus vías de escape, como las fiestas profanas y el sexo. El amor y la sexualidad han estado siempre muy ligados a la naturaleza humana.
Así, en todas las culturas y civilizaciones han estado siempre, con distintas formas de representación estos motivos eróticos, la mayoría de las veces retando la voluntad de la propia iglesia católica. Siempre el arte o la literatura ha dado rienda suelta al sexo en muchas de sus variantes: bestialismo, incesto, poligamia y prostitución.
En el arte de la Edad Media, en los arcos de las portadas, en los capiteles, en ventanas y en columnas interiores suelen representase escenas sacadas de las Sagradas Escrituras. Que, a veces, se intercalan con seres sacados de las leyendas y mitos clásicos (sirenas y grifos).
A cambio, en canecillos situados en el alero del tejado y en algunos capiteles exteriores predominan escenas profanas: gente corriente, artesanos… e imágenes que no parecen las más adecuadas para adornar un templo de índole religiosa.
En nuestro caso, en el citado capitel de Santa María, podemos observar a dos seres fantásticos (una sirena y un mono) practicando entre ellos sexo oral.
Colocar escenas del más desafortunado erotismo no era la mejor manera de avisar a los fieles de los peligros que tienen que evitar para no caer al sexto mandamiento bíblico. Si lo hicieron con esa finalidad, lograron lo contradictorio.
Podemos prestar atención, en uno de los pilares del claustro, al frente de la entrada al templo por la puerta de la Adoración o Norte, otra curiosidad. Una hornacina con la imagen de una Virgen con el niño en piedra policromada, y bajo esta, un mosaico de cerámica a cuerda seca, muy deteriorado con la siguiente inscripción: “SI QUIERES QUE TU DOLOR SE CONVIERTA EN ALEGRÏA NO TE PASES PECADOR SIN DECIR AVE MARÏA”.
Gracias a un artículo de Manuel López Martínez, bajo titulo “No Tiene Desperdicio” y publicado en diversas revistas de Semana Santa de 2005, sacamos otra curiosidad acerca del desaparecido ciprés centenario que se alzaba imponente en los desaparecidos jardines del claustro de Santa María.
La madera, de este seco ciprés, se utilizó para hacer las puertas de cuarterones de la iglesia de Santa Teresa.
Como ultimas curiosidades, la primera, es que en una de la actual intervención, que se viene desarrollando, se le ha restituido su antiguo aspecto original mudéjar, eliminándose los añadidos decimonónicos de escaso gusto, por ello, muchos nostálgicos de Santa María, ven o verán un templo distinto al de 1983.
Lo segundo, es acerca del exterior, si observamos los basamentos de la puerta Norte o de la Adoración, podemos encontrar varios cirios o velas encendidas, puesta aquí por personas anónimas, como signos de esperanza y de manifiesto, para la pronta apertura de la iglesia, al uso religioso y cultural.
EL CLAUSTRO GÓTICO DE SANTA MARÍA DE LOS REALES
Hoy en pleno mes de junio del año 2009, los ubetenses nos preguntamos, si volveremos alguna vez ha disfrutar la historia de esta iglesia y de recuperar las tradiciones perdidas que supuso su clausura y que una generación entera no ha disfrutado de su emblemático interior. Posiblemente para dentro de dos o tres años la iglesia volverá ha tener culto, tras la finalización de las obras de renovación que se están realizando actualmente.
Las mismas intentan mejorar y acondicionar las instalaciones en la que se enlosará el templo con mármol (en sustitución de las primitivas losas de piedra), así como llevar a cabo una intervención en los muros y bóvedas del claustro. El proyecto incluye, además, una nueva iluminación eléctrica para el edificio, y la ejecución de una nueva bóveda de piedra tras la puerta de la Virgen de la Consolada. También se intervendrá en las dependencias parroquiales, en la antesala capitular y en la sala capitular, además incluye la adaptación de la nueva sacristía y la reparación del contrafuerte de piedra de la fachada principal del templo, entre otras acciones. La última actuación se ejecutará en las capillas de la Virgen de Guadalupe y en la de Jesús Nazareno. Con un plazo de ejecución de 32 meses. (Quedan todavía 24 meses, para finalizar la última fase.)
Las fachadas del templo son de estilo renacimiento del siglo XVII, el claustro del siglo XVI, es gótico, y el interior hoy restaurado está formado por cinco naves que se dividen por pilares y arcos de estilo gótico-mudéjar sevillano, el interior se cubría hasta 1986 con yeserías barrocas En la actual restauración, muy criticada trágicamente, por algunos historiadores como Antonio Almagro, se ha eliminado todos los añadidos que presentaba el templo como las bóvedas de cañón y entablamentos de yeso y blanqueado de los muros, que ocultaban escenográficamente la pureza y modestia de un templo gótico-mudéjar.
El claustro se dispone a la izquierda, aprovechando el sahn de la mezquita, y adopta forma de trapecio irregular, con tres galerías alrededor del patio, siendo la del Norte la que comunica con la fachada principal. Nos dice Juan Pasquau, en su Biografía de Úbeda: “…verdaderos remansos de paz estos claustros de las iglesias catedrales o colegiales, cuya densidad histórica y artística, impermeable a cualquier sugestión frívola, envuelve el pensamiento en su sentimiento amoroso. Más que el mérito arquitectónico en sí mismo, son el ambiente sedante, el silencio, la presencia de cipreses –a cuya sugestión viene unirse la difusa, tremente, armonía del órgano cercano- quienes prestan en ese recinto su natural, no estudiado encanto, haciendo de él un sitio real para el espíritu. Sede de la meditación. Pocos climas así pueden invitar, con una serenidad, a la descentrada o atormentada psicología –desmayase- de los hombres heridos de nostalgia, tocados de infinito Azorín -tan obseso del tiempo- hubiere escrito un maravilloso artículo acogido a la umbrosidad del claustro de Santa María de los Reales Alcázares, en los atardeceres estivales concordados de “Ángelus y golondrinas”.
El claustro, las galerías son de arcos apuntados sobre pilares rectangulares, similares a los del interior, mientras las bóvedas de posterior construcción, son de crucería simple en los lados Este y Oeste, y de terceletes en el Norte; en ellas menudean los escudos del canónigo Becerra, que junto con el obispo Suárez, en la puerta de entrada fechan su construcción (1500-1520).
Lo más destacable del interior son las capillas y las rejas que las cierran, en especial la de la Yedra y los Becerra. Hablando de rejas, fue un fallo en los años sesenta del siglo XX, el desmontado de la reja del antiguo coro. El desmontado del coro si fue un acierto, pero el de la reja, no.
Todas las capillas que rodean el recinto son del gótico final, excepto las del testero, En el testero, se sitúa, la de los Sabater en el lado derecho, esta presenta portada renacentista e interior barroco, la Mayor en el centro, que presenta una cúpula barroca, y un retablo de piedra gótico procedente del antiguo coro, el cual desentona el conjunto barroco, de la capilla.
Esperemos, que una vez se termine con el largo proceso de rehabilitación vuelvan a su sitio las rejas que cerraban el patio del claustro, que fueron instaladas in situ, en el siglo XIX, por el Prior de Santa María Alejandro Monteagudo. Hace unos años, el anterior concejal de urbanismo el señor Francisco Mendieta en la web Cruz de Guía, alegó que el proyectado monumento a la Semana Santa, cabría la posibilidad de instalarlo en la zona central del patio de este Templo.
miércoles, 17 de junio de 2009
Carpinteros del futuro y el nuevo artesonado de Santa María.
Artesonado de Santa María, realizado en los años 2.005 y 2.006 por la granadina empresa Los Tres Juanes.
GUILLERMO PEDROSA
GRANADA
Incorporan un sistema tecnológico que permite diseñar piezas por ordenador
El arte mudéjar es aquel que dejaron los musulmanes que no quisieron abandonar España después de la Reconquista. La cooperativa Los Tres Juanes de Atarfe (Granada) está especializada en la restauración y el diseño de las obras que pertenecen a este estilo artístico tan abundante en Andalucía, así como en la construcción con madera, una materia poco utilizada por la arquitectura de nuestro país. A pesar de lo tradicional que es su actividad, este taller se suma al progreso y no para de incorporar las más modernas tecnologías. Por eso el delegado de Innovación, Francisco Cuenca, visitó ayer las instalaciones y observó a una de sus máquinas más punteras en funcionamiento.
Dicho sistema permite a los operarios realizar el diseño de una pieza por ordenador, mediante un programa de dibujo, y trasladarlo hasta la máquina de corte, un monstruo automático capaz de escoger por sí mismo el tipo de taladro o de sierra que necesita para convertir el bloque de madera que le sirven en bandeja en una réplica exacta de la pieza diseñada por ordenador.
Según explica el presidente de la cooperativa, Ángel López, el trabajo de ensamblaje de estas piezas para construir las armaduras y los techos artesanados sigue siendo artesanal y manual, como lo es el arte mudéjar. Pero elaborar estas piezas de manera automática les ha devuelto mucho tiempo para poder dedicarse a otras tareas de restauración de obras antiguas que sí precisan un trato mucho más personal.
Trabajo artesanal
A pesar de la incorporación de las nuevas tecnologías, en Los Tres Juanes siguen valorando el trabajo artesanal y de calidad, hecho tal y como se hacía originalmente. Por eso en otras de sus especialidades, la construcción con madera, tratan de conseguir el mejor material, la mobila vieja. Se trata de una madera de pino antiguo que tiene más de 200 años de antigüedad. Y es que la madera, como el vino, mejora con la edad. «Se trata de un material denso, duro y muy curado por el tiempo», subrayan los expertos de la cooperativa. Esta materia prima es importada desde EE UU, del derribo de edificios y estructuras antiguas, ya que aquí es menos abundante la construcción con madera.
La cooperativa Los Tres Juanes nació hace apenas 20 años, cuando el Ayuntamiento de Atarfe creó una escuela-taller de carpintería. Poco después algunos de sus alumnos se asociaban bajo la presidencia de Ángel López. Desde entonces, esta sociedad ha restaurado obras en la Alhambra, el Museo Picasso en Málaga, la Iglesia de Santa María en Úbeda (Jaén)... Y ha desarrollado artesonados mudéjares en California, entre otros muchos lugares del mundo.
Su especialidad en arte mudéjar, construcción en madera y restauración histórica los convierte en un negocio casi único en su especie, que ahora, gracias a las nuevas tecnologías, puede pulir su trabajo mejor que nunca.
Añoranza de Santa María.
La rehabilitación ha sufrido numerosos avatares a lo largo de los veintiséis años, que permanece cerrada. Con un trabajo muy complicado, de verdadera ingeniería, la iglesia de Santa María, se ha afianzado, consolidado y restaurado, quedando aún, muchos remates, como por ejemplo la desmantelada Capilla de Jesús.
El terrible espectáculo de sus pilares vencidos, que amenazaban la ruina y total desaparición del bello templo, se solucionó no hace muchos años, gracias a un complicado sistema de alivio de carga, que en algunos casos ha sido hasta de 100 toneladas y de gigantesca cimentación.
Lo que si resulta evidente, incluso a los ojos del profano, es la calidad de la obra que se ha llevado y se esta llevando a cabo.
Merece la pena poner en valor al emblemático monumento, cuyas obras se han retrasado más allá de todas las previsiones. Esperemos, que su apertura este cada día más próxima, al menos a tenor de que sea cierta la promesa del actual Director de Bienes Culturales del Gobierno Andaluz, Jesús Romero, ya que la anterior Consejera de Cultura, Carmen Calvo, prometió su apertura para los años 2002 y 2003.
La idoneidad del templo permitirá conciliar el culto religioso, conciertos de música clásica y las visitas de los turistas y de muchos ubetenses. De ahí que todos los ubetenses esperemos impacientes el momento en el que se reabra un templo muy conocido, aunque sólo en libros y en el exterior. Un día, hace algunos años, ardió el ciprés milenario que prestaba su lanza de espiritualidad a la penumbra del medievo claustro.
Iglesia, en que la base gótica florida de su construcción se ve soliviantada por los restos musulmanes, románicos, renacentistas, barrocos, neoclásicos, hasta constituir un conjunto que el historiador Juan Pasquau calificara de “…inigualable democracia artística, en la que todos los estilos pugnan por sobresalir y ninguno lo consigue en exclusiva”, y que según José Ángel Montero La Rubia nos comenta que existe una misteriosa leyenda, transmitida de generación en generación a la luz de las velas en muchos hogares del barrio de San Millán, que la iglesia de Santa María es victima de una antigua maldición, lanzada por un nigromante forastero y basada en el terrible mal de ojo. Así nos explicamos que desde 1396 este permanentemente en obras.
Como última curiosidad, una poesía del desaparecido Manuel Martell López (dep); titulada Añoranza de Santa María.
¡Cuándo veré, otra vez, la Yedra aquella
en tu verja claustral entrelazada
y el gótico mirando de tu arcada,
nuevamente gozar obra tan bella!
¡Cuándo se hará pedazos mi querella
de puerta, tan querida, ver cerrada…!
¡Cuándo volveré a entrar, y mis pisadas
deje allí los fervores de mi huella…!
¡Cuando repicara tus campanario,
cuando vendrá a su altar nuestra Patrona,
y… cuando estará abierto tu Sagrario…!
Impaciente se siente mi persona
De rezar en tus bancos el Rosario
Y ¡poner en mis sienes tu corona…!
martes, 16 de junio de 2009
SANTA MARÍA DE ÚBEDA; LA FE DE UN PUEBLO LABRADA EN PIEDRA
Partiendo de que en España hay 22.000 parroquias y calculando que en el ámbito de cada una, por término medio, hay un templo, una ermita y una casa religiosa nos da el resultado de unos 60.000 monumentos. Este patrimonio fue obra de titanes construirlos y un milagro que la iglesia pueda restaurarlos y conservarlos.
Entre esos 60.000 monumentos sobresale de modo especial en Úbeda, la iglesia Colegial de Santa María de los Reales Alcázares, patrimonio ya de toda la Humanidad.
Las iglesias como este de Santa María, es un extraordinario patrimonio que nos corresponde disfrutar no solo a los católicos, además de valorarlos y conservarlos.
Las obras de Santa María, están a punto de culminar, (pavimento, capilla de los Orozco, Sacristía y otras dependencias es lo que queda) y su apertura se pronostica para el año 2011 o 2012 como mucho. Ya con tanta mentira de nuestros políticos, no lo creemos. Ya que se indicó su apertura para el 1998 o 1999 y luego para el 2001 o 2004 y ahora estamos en 2009, y aún no esta concluida.
La administración publica de la Junta de Andalucía, área de Cultura, se ha dejado ahí una buena cantidad económica, pero como el templo ya está usable los “comandos autónomos” en vez de colaborar con la Junta de Andalucía, para su culminación, han comenzado a recordar que Santa María pertenece a la iglesia.
Hace unos años Santo Domingo desmantelada por la iglesia y restaurada por la administración fue cedida al pueblo para uso de conciertos y sala de exposiciones. Ahora, ha sido intercambiada por la iglesia San Lorenzo, abandonada a su suerte por la misma, para que la administración también arregle esta de San Lorenzo, y continué con lo suyo que es poner en valor el patrimonio de la Iglesia, para luego ésta lo reclame cuando le interese, como ha sucedido con el caso de Santo Domingo. Bajo mi opinión todo este patrimonio debe de ser público, aunque ahora es de toda la humanidad.
Esperemos que la cosa cambie en nuestra ciudad, y que con el nuevo Obispo, haya mejores relaciones con nuestro Ayuntamiento, para tener todos los templos (incluyendo la de Santa María) y conventos abiertos para visitas culturales, e inclusive para poder organizar conciertos de música-sacra en las mismas.
El conjunto de nuestra iglesia mayor, que más allá de sus aspectos religiosos y estéticos, se han convertido en testimonio excepcional de la Historia. De la historia de la Fe, desde luego, de la Historia del Arte por añadidura, pero por encima de ambas, Santa María como todos los monumentos religiosos (88 catedrales, iglesias, conventos…) de España, son la historia del mismo hombre, del hombre en la tierra y de sus anhelos de resurrección.
En el templo dan la mano la vida y la muerte, pero por ignorancia de esos ciertos “comandos autónomos”, creen que dentro de los sacros muros de esos templos, reside alguna divinidad, y es por eso que no quieren realizar diversas actividades culturales. Esta divinidad esta dentro de nuestros corazones. Todos somos templos espirituales de Dios. He aquí unos breves relatos sacados de la Sagradas Escrituras (He 17, 22-24. Pablo, puesto en pie en medio del Areópago dijo:
Altares, sepulcros, capillas y rejas, forman un tejido histórico en torno al altar que, como permanente oración a la que artífices dieron forma artística, nos recuerda permanentemente a los generosos donantes (reyes, príncipes, prelados, canónigos, nobles, mercaderes, gremios…) que fundaron una capellanía, dotaron unos aniversarios, encargaron determinadas misas o pagaron cantidad de limosnas.
A cambio la iglesia colegial o catedral, les daba entierro en sus naves y claustro, asegurándoles su memoria en los aniversarios y días de difuntos, como benefactores del primer templo de la ciudad.
Tal es la característica de que Santa María de Úbeda, es uno de los templos que más transformaciones ha sufrido de ahí que no exista unidad arquitectónica.