La primera crónica o efeméride es; el 75 Aniversario de la muerte del Cronista de Jaén, Alfredo Cazaban Laguna.
Antes de su muerte, en 1927, el Alcalde de Úbeda, Baltasar Lara Navarrete, de acuerdo con el Pleno, le hace Hijo Ilustre de Úbeda y a una placita cercana a San Isidoro se le pone su nombre. Úbeda tiene la suerte de contar con un monumento a este singular Cronista. Lo podemos ver en el centro de un jardín situado en la calle Corredera de San Fernando. Este monumento está formado por un monolito de cantería y un bajorrelieve con la efigie del Cronista Cazaban, realizado por Juan Luis Vassallo. Bajo la placa una bella inscripción en letras de hierro de forja en relieve que dice: “A Alfredo Cazaban. Su pueblo y sus amigos”. Parece ser que a los 75 años de su muerte, los organismos Culturales y Políticos del pueblo que le vio nacer y de la provincia de Jaén, se han olvidado de una de las figuras más célebres que hemos tenido en el campo de la cultura.
Solo me conviene en recordarlo, con un artículo recopilado de su admirable Revista Don Lope de Sosa: …El Articulo publicado En Abril de 1922; se titula; Úbeda monumental. EL CLAUSTRO DE SANTA MARÍA DE LOS REALES ALCÁZARES…
“…El severo claustro de la antigua Colegiata de Santa Maria de los Reales Alcázares de la Ciudad de Úbeda, ha sido reproducido de una manera admirable… que hoy honra las páginas de Don Lope de Sosa. Lasso de la Vega pasó breves horas en aquella ciudad y bañando su alma en aquel ambiente, donde flotan, augustos y grandiosos, los recuerdos de su historia esplendida y la mágica influencia de sus tesoros monumentales, no solo arrancó con su máquina fotográfica las maravillosas plásticas, sino que, sintiendo en su espíritu la evocación de lo pasado, escribió al dorso de la fotografía estas dos bellas estrofas:
Es el oscuro claustro de la vieja Abadía…
El silencio romántico de la gótica nave
, turba tan solo, a veces, la vaga melodía
, que un marfileño monge, arranca al viejo clave.
…Y buscan nuestros ojos y no contemplan nada
, ni en la gótica nave, ni en el jardín desierto.
Solo percibe el alma esa voz encantada
, de todo lo que vive, después de haberse muerto.
Poeta de alta inspiración, Lasso de la Vega, ha juntado en la fotografía y en las estrofas lo que admiraron sus ojos y lo conmovió su ser. Poesía y arte que son sus páginas excelsas, que ofrendó, en prenda de amistad, al ilustre Cronista de Úbeda, Manuel Muro García, como recuerdo de su visita a la gloriosa ciudad, que duerme en la altura de la Loma al arrullo de los romances que cantan sus tradiciones y sus leyendas…”
Hablando de visitas y situándonos otra vez en el claustro gótico de la clausurada Iglesia de Santa María, podemos ver en el interior de dicho portillo árabe, o puerta de San Fernando; (bautizada así por Juanito Barranco) una bella placa conmemorativa muy deteriorada por las actuales obras que dice: