martes, 4 de octubre de 2011

Bienes Patrimoniales Perdidos en la última y larga Restauración, de Santa María. (Parte 1).

El bien patrimonial más importante perdido en Santa María, ha sido la decoración barroca de la Capilla de los Molina construida en el siglo XVII y perfectamente documentada en su construcción.
Otro elemento de bien patrimonial perdido en Santa María, lo tenemos en la clave de la bóveda de tercelete de la conocida Capilla de la Yedra. Este elemento era un escudo heráldico perteneciente al fundador de la Capilla
foto  J J García Toral.

Vista Actual de la Capilla Bautismal (a la izquierda) y de la Virgen de Gracia (a la derecha), sin las rejas de madera.
foto de Manuel Fonfría Vizcaíno.


Hoy la Actual Capilla del Sagrario (Capilla de los Molina) se ha convertido en un espacio falto de toda personalidad y tremendamente frío en el que sólo predomina la piedra y cierta desolación, tras la pérdida de su ornamentación barroca.
Foto Diego Godoy Cejudo.

Aspecto actual de la Reja de Madera de la Capilla de los Magaña.
foto Diego Godoy Cejudo.



Al fin llegó el deseado día… Santa María De Los Reales Alcázares, Abre Sus Puertas. Y se ha cumplido, 8 de Mayo de 2011, a las seis y treinta de la tarde, la iglesia, en procesión popular desde la iglesia de San Pablo, presidida por el obispo de la diócesis del Santo Reino, Ramón del Hoyo, y el entonces alcalde de la ciudad Marcelino Sánchez y otras autoridades civiles y religiosas, volvía, casi después de 28 años, a recibir a su Patrona, y Santa María quedaba de nuevo abierta, volviendo a reencontrarse con el culto, la cultura, con su pueblo, con su propia historia y con Jesucristo.


Este templo que ha estado veintiocho años cerrada al público, debido a que sus obras no han sido seguidas, sino que se han realizado en varias fases que corresponde a fases de urgencia a las comprendidas entre los años 1983-1984, obras de mal restauración comprendidas entre los años 1986- 1987, actuaciones de emergencia en 1989, obras de consolidación comprendidas entre 1992-1995 y como actuación de emergencia de consolidación entre los años 1997-1998. Y obras de restauración las ejecutadas entre los años 2000-2001, 2002-2003, 2004-2006, 2007-2008 y 2009-2011. Por lo tanto mencionar, que el templo ha estado veinte años en obras, las cuales han tenido un coste de más de seiscientos millones de la antigua peseta.

Capilla de los Molina.

El bien patrimonial más importante perdido en Santa María, ha sido la decoración barroca de la Capilla de los Molina construida en el siglo XVII y perfectamente documentada en su construcción, que ahora nos presenta la pobre e irregular piedra de sus muros contrastando de forma más que insípido con la primitiva cúpula encamonada (sin rehabilitar) y con una bóveda de cañón de nueva obra, sustentado sobre un distinto friso, de piedra artificial.

De la citada capilla de los Molina, propiedad de la Familia Sabater, como ya he comentado, se perdió en la segunda fase de restauración (años 2002-2003), un entablamento completo superior encamonado y pilastras dónde descansaba la cúpula y bóveda de la capilla. Además se ha perdido para siempre, la recargada decoración barroca. Dicha ornamentación es dorada a finales del siglo XIX, y ofrecía varios temas: clásicos como grutescos y rosetones, geométricos, se limitaban a resaltar las formas arquitectónicas y pintadas que simulaban los paramentos de los muros y con medallones con la figura del Sagrado Corazón de María.

Capilla de la Yedra.

Otro elemento de bien patrimonial perdido en Santa María, lo tenemos en la clave de la bóveda de tercelete de la conocida Capilla de la Yedra. Este elemento era un escudo heráldico perteneciente a fundador de la Capilla, el Canónigo Rodrigo Sagredo.  Este escudo de armas, era de bronce estaba policromado y se evaporó en la mencionada segunda fase de restauración (años 2002-2003).

En esta referida tercera fase de restauración, igualmente se perdieron dos importantes rejas de madera del siglo XVII.

Las mencionadas rejas cerraban dos capillas; la primera cerraba, dónde hoy se encuentra la Virgen de Gracia, y la otra reja  de más valor arquitectónico que la otra, cerraba la capilla de los Magaña; dónde en la actualidad se guarda la pila bautismal mudéjar y un cuadro con la representación del Bautismo de Cristo, obra de Marcelo Góngora. Esta última reja, se encuentra en la actualidad troceada, en las dependencias del claustro del templo, a la espera de una posterior restauración.